En primavera tiene lugar una nueva etapa en el proceso de crecimiento del ciclo de la vid, es el momento vegetativo de la vid en el que se despierta; después de la poda, la savia comienza a circular de nuevo tras unos meses de descanso, lo que conocemos como el lloro de la vid, anunciando la llegada de los primeros brotes. Superada la brotación, durante el mes de mayo y también junio, comenzaremos a observar cómo las cepas empiezan a mostrar lo que será el futuro fruto, pasando primero por las inflorescencias que luego se convertirán en flores. Estaremos en plena floración.